He dormido bien esta noche para
estar bien despierto y he estado haciendo ejercicio desde hace un mes con tal
de entender lo mucho que a ti te gusta; he tomado después de eso aquel jugo
verde que sabe horrible pero que dices es el más nutritivo. Estuve escuchando
las canciones que más te gustan y me he aprendido algunas. Ya leí un par de tus
libros favoritos y casi me sé de memoria los diálogos de tus películas
favoritas. He repasado mentalmente lo que sé de ti para estar seguro sobre
quién eres y no tener ninguna duda de lo que te quiero decir. Te he citado esta
tarde en el parque central para comer lo que a tu parecer es lo más exquisito
de la tierra. He pasado a comprar un ramo de rosas de tu color predilecto y
llevo en mi bolsillo un par de los chocolates que te vuelven loca. Me he
rociado de la loción masculina que más te gusta y te he cantado tu canción
favorita. Y ahora que estamos aquí, en el sitio exacto que adoras, el que
tantos recuerdos te trae, tu favorito. Quiero decirte que he reunido todo
cuanto he podido de las cosas que te gustan con tal de hacer este momento perfecto
y si hace falta algo solo dímelo, que cruzaré medio mundo hasta conseguirlo y
si estuviera en el cielo moriría en el intento de traerlo a ti. Estoy dispuesto
a hacer todo por ti, a vivir por ti y darte todo aquello que amas, todo con tal
de tener una posibilidad de obtener lo que más amo, lo que más espero, lo que
más anhelo… tú.