Antes de que pase (porque tiene que pasar). Permíteme
decirte lo mucho que te quiero y lo indispensable que te has vuelto en mi vida.
Déjame decirte que te he soñado esta noche y la noche anterior a esta, y he
perdido la cuenta de las veces que te sueño y de hecho ya no sé si te estoy
pensando o soñando.
Antes
de que pase (porque tiene que pasar). Permíteme contarte cómo me pienso contigo
cuando amanece y cómo he dormido de feliz después de escucharte por la noche.
Después de saber todos aquellos detalles irrelevantes que pasan en tu vida y
que de alguna forma se vuelven importantes para mí.
Antes
de que pase (porque tiene que pasar). Permíteme expresar lo feliz que he sido
al compartir contigo bellos momentos en los que me has hecho sentir, quieras o
no, especial. Momentos en que me has dado la dicha de poder comprobar que sin
lugar a dudas eres singular.
Antes
de que pase (porque tiene que pasar), y te hayan dejado de parecen interesantes
las cosas que digo y hago y ya no sientas esa sensación mágica que te envuelve
cuando estás conmigo, hasta que un día hayas perdido completamente el interés
en mí…
Antes
de que pase (porque tiene que pasar) y te hayas ido para nunca regresar.
Permíteme abrazarte muy fuerte, tan fuerte como esos abrazos que hacen sentir a
uno de vuelta en casa, que hasta dudes si realmente te quieres marchar. Permíteme decirte una vez más
que te quiero y que quedarás por siempre en mi corazón.
Antes
de que pase (que esto, lo nuestro termine). Te desearé seas muy feliz, aunque
dicha felicidad no me implique. Te daré un beso y te dejaré partir diciéndote
y teniendo bien claro que nunca me podré olvidar de ti.