No hallaba cómo decirlo, cómo demostrarlo, qué darte a fin
de que lo comprendieras. Tú me diste tu amor y yo no pude mas que no
corresponderlo, pues no merecía tan grande sentimiento.
Tú me diste lo mejor y yo quería darte lo mismo, y no, yo no
era lo mejor. Y así, quizás ahora lo entiendas. Así, quedándome sin ti, logré
sacrificar mi alegría, a fin de que te quedaras con una alegría mucho mayor a
la que te puedo dar. Así demostré que te amaba y que te quiero, mucho más de lo
que yo me quiero.
0 comentarios